1 del doce

Viajo a Zaragoza. Nieve en los costados y en las llanuras de Guadalajara y Soria. Parece un pasaje de Fargo. Las paredes sujetan carteles anunciando el concierto de Bunbury en su ciudad. Yo voy esta noche al palacio de los deportes, el show parece aún más arrebatador que el del Hellville. Rebosan las guitarras por todos lados del primer pirata decente que me he bajado de la gira. Espero confirmarlo esta noche con poca previa en la cabeza y sentado relajado. Calculo un par de cubalibres y para adentro. Las entradas son numeradas, creo que he dejado definitivamente atrás las colas y las carreras. Tengo que prepararle a Luís el mapa del metro que ya he encontrado, y a Fran el libro de boxeo que le prometí. Estoy pensando una dedicatoria. "…Para cisco Fran, el hombre que no se equivoca nunca”. "...Para C.F. que jamás se desvió de la línea de Cash”. “...Para cisco Fran que sabe separar el grano de la paja…”. “...Para Fran que ha recorrido un duro camino también”. Se me ocurren mil quinientas y todas ciertas. Todas le retratan como le he visto desde siempre.