22.2.07


Siguiendo con los post acelerados sobre metalenguaje en tiempos de fresquera, vamos a repasar la situación creada. Jack keruac palmo de cirrosis y yo no quiero acompañarle en su final. Soy adicto a los yogures danone por la tarde y por la noche, pero también le doy a la copa danone en su versión barata carrefour. Segolene Royal se va a cubrir de estiércol y es difícil ir al irlandés de la cruz un miércoles porque a las 11 hacen el club de la comedia de la paramount con actuaciones de monologistas y cuando te quieres dar cuenta mientras los Red´s de Anfield se llevan el partido, la taberna esta petá de gafas pasta y de jóvenes profesionales con trajes que no te dejan casi ver los goles. Claro la violencia esta mal vista, todos la condenamos, me pongo la chaqueta y me marcho. Dirán ustedes que siempre estoy marchándome y viajando en trenes. Es mentira. "Me voy, me voy, me voy, pero me quedo,/ pero me voy, desierto y sin arena” Barriendo el aire con una mano por el cielo y otra por el suelo, mirando el viento viajero desde aquí, me pongo el traje de luces del olvido, me pongo la corbata de este entierro, me tomo la achicoria del rencor. Cuando de noche vuelva a torear bajo la luna, me acordare del consejo que me dio Dios “no dejes que la noche arruine tus esquemas, y si te aprieta Durex, usa Control”. Me encanta Peter Handke, vale más que todo Paúl Auster, Jacques Tati mola más que Búster Keaton pero menos que Charlot. Cuando vaya a Londres en Abril voy ha hacerme una camiseta que ponga “soy el hijo secreto de Bob Dylan” “¿hay alguna academia de ingles por aquí?”. Ya se porque no postea nadie. He cambiado la configuración a blogger Beta, y no pueden entrar. Menos mal que no seguí adelante porque también daba la posibilidad de poner anuncios y ganar dinero y a mi el dinero me vuelve loco. Llevo años planificando un plan que me permita un loff, así daría igual el blogger beta. Nunca más la imitación de la copa danone del carrefour. La nevera plena de copas danone de verdad. Hay conexiones a internet que dan el teléfono gratis, la mía lo tiene creo, pero no suena el teléfono. Podrían dar la conexión y una planta aromática carnívora. Me encantan los retratos de Jeanne Hébuterne, me hubiera encantado vivir en aquel Paris. El viernes estrenan “Paris je t'aime” y quizás me deje caer por el cine, espero no dejarme caer luego por las tabernas y montar un seminario de metalenguaje en tiempos de fresquera. Blogger no deja postear en la versión beta, que tiene más trampas que sus tocayos los extintos vídeos. Por eso no aparecen las gentiles damas, los furiosos poetas, los hilarantes críticos, los efebos bachilleres, las efluvias doncellas. Nadie les hecha de menos, a nadie espera el que nada espera. OH dulces muchachas que queréis saber de mi vida… Apartad de mí este cáliz! Cuando vuelvas a mirar esta ventana estaré lejos en el camino ya. Detrás del espejo me miran los ojos, de quien alguna vez susurro un adiós. Oh, la fiesta secreta de mi cumpleaños!! Guauuu! Señorita sin brazos, descorche el champán!! Quien sabe donde reclamaran mis modestos esfuerzos por la justicia poética y el libar profundo. Sexos opuestos, monjas conversas, dense la paz y marchen de aquí.

18.2.07

No se si así se podrá justificar una existencia. Existen perspectivas que toman la apariencia por la no apariencia. Por el ser o la verdad. Hay puntos de vista por ahí que consideran las ficciones no como un producto capaz de violentar la realidad, sino como la realidad misma. Mi realidad misma. No puedes ser una realidad virtual mi escrito de ayer, no puede ser una realidad ficticia. No adoptar una perspectiva verdadera, que afirme la existencia, seria la negación de la misma. El conocimiento de la propia realidad es en si misma una afirmación de la voluntad de poder, es decir de vivir. La mirada libre de cualquier velo de ilusión, puede producir espanto. Ese espanto no es sino el agarre más profundo. La apariencia, la ilusión, la mentira, el engaño, producen las apariencias, la pose y la mentira. Ficciones que son la condición de la vida sin posibilidad. De ese conocimiento trágico me salvara la afirmación. La afirmación en la propia condición vital y en el propio camino. Como dijo Nietzsche, no hay que emplear un folio para lo que se puede decir en medio. Esto es lo que le faltaba al post de ayer.

17.2.07



Se llega uno a la barra, se selecciona sitio, se escoge taburete, se pide la primera.
Se toma conciencia de que se tiene el espejo delante y de que estas justo en el centro. Primer trago y primera musica que me suena en la cabeza, Ain't talkin', just walkin' through this weary world of woe heart burnin', still yearnin' no one on earth would ever know. Me queda bien el pelo mojado, me ha caído toda el agua del mundo bajando hasta aquí, al fin y al cabo estoy en el centro del espejo. Trinidad Jiménez y una amiga entran y se ponen a mi derecha, la amiga de Trinidad me mira, pido la segunda caña. El tipo de la barra se vuelve loco de atenciones a la Secretaria de Estado para asuntos Ibero-Americanos. Para empezar les corta un tomatito (la especialidad de la casa) y se lo sirve garboso. Le miro, me mira, pero no me ve aunque presiento que nota las navajas de mis ojos ante su falta de atención a mí. Es decir, que a mi no me ha puesto tapa alguna. Esta noche soy invisible. Me quito la chaqueta y la dejo en un poyete, me bajo la cremallera de la sudadera roja porque estoy aquí para quedarme. Me enciendo un wiston y miro a la clientela, giro la cabeza y la amiga de Trini me mira. Me mosqueo, no me gusta estar solo y que me miren. El barman vuelve a contarle a Trini que abajo tiene un saloncito abovedado que solo abre cuando vienen sus amigos flamenquitos, Morente y no se quien más, que cuando quiera Trini la abre el sótano y baja con sus amigas o con quien quiera. Pido otra caña, solo son las 9 de la noche. Cambio el mp3 de la mente y me pongo a Peret. No estaba muerto, que estaba tomando cañas. Y una lágrima me baja por la arena de la comisura de los labios. El espejo ya no me refleja tan claro, por un lado me estoy encorvando más de lo debido, solo me acuerdo y me esfuerzo en estirarme cuando llevo compañía femenina. Miro a la amiga de Trini y me estiro, ella me mira y la comente algo a su amiga. Busco temas de conversación por si acaso me entra. Lo primero que me viene a la cabeza seria decirla -“Que, con Fidel no tenéis huevos, ¿a que no?”. Remiro el espejo y mi cara es una muesca, llevo 4 cañas aquí y la quijada se me ha relajado, no puedo mantener el gesto de “estoy aquí por que quiero, ¿eh?”, ahora canto que no tengo otra cosa que hacer, aunque también esté aquí porque quiera. Miro las fotos de Mohamed Ali de la decoración. Siempre admire a Ali, una vez quise pegar al encargado que ahora tengo porque estaba acosando a un compañero. Salio corriendo. Mi compañero me dijo -“has estado a punto de sacar a Ali”. Me pase una semana haciendo su típico baile-juego de piernas ante el contrario. No hay nada como que me rían una gracia para no parar de hacerla. Voy a mear. Vuelvo. Hay un tipo. Me mira, le miro, miro mi vaso de cerveza Mahon. El tipo comprende que yo estaba allí. –Perdona ¿estabas aquí? –Si llevo aquí 2 horas y tu una, sabes perfectamente que estoy aquí. Se levanta, se busca un espacio con su amigo. La amiga de Trini me sonríe, hago mi giro de cabeza guiñando el ojo mientras la pongo morritos Mick Jagger. Se descojona y desconcentra a Trini que la esta contando las virtudes de José Luis. La mente me bulle, la vista se me nubla, me froto los ojos sin acordarme de que la última vez que lo hice, me puse una lentilla en la ceja y tuve que ir a que me la sacara el óptico. Cambio el disco, me gustaría estar en la tierra del algodón donde nací, look away, look away, look away, Dixieland. Me acuerdo de la primera vez que estuve en el Vidales con Luis Sotillos. Yo venia a aclarar unas cosas y a recuperar a un amigo, él me contó las performances que tenia en la cabeza y el pedo de la noche anterior. Nada volvió a se lo mismo. -¿Verdad Luis? -¿Me pones otra caña por favor? Me resbalo de la banqueta. Pa chulo yo. A tomar por culo la banqueta. De pie. Quien bebe solo tiene que tener dignidad para aguantarse de pie delante de la barra sin ayuda de ningún tipo de ergonomía. Trini se tira a la banqueta, sino hubiera tenido aquel discurso de “esta chupa es mía y me la pongo porque quiero” en las elecciones municipales anteriores, se la debiera ofrecido hace un rato. Sino la hubiera dado el tipo el aperitivo que me estaba preparando a mí, también. Vaya discurso de mierda para enfrentarse a Gallardon. Fuera llueve y hace frío pero mi corazón y mi cabeza están pensando otra cosa, haciendo equilibrios para no pensar otra cosa, llorando por pensar en no se que cosa. Suena el teléfono. Es Juanlu. Me pone un mensaje de que ha visto ahora mi llamada. –no problem, estoy celebrando mi cumpleaños pero va ha haber más pases. So don't fear if you hear, A foreign sound to your ear, It's alright, Ma, I'm only sighing. Miro el reloj, el tío de la barra me mira como si le estorbara, Estoy a punto de acompañar la solicitud de otra caña con la apostilla,-Tengo dinero!. La pido y tengo que volver a repetírselo para más vergüenza, porque al parecer ya no se me entiende. Trini y su palmera pagan y se van. La morena me mira, instintivamente la hago el gesto de adelantar los pulgares a la altura de la cintura mientras muevo las caderas. La tia se carcajea. I give her my heart but she wanted my soul, but don't think twice, it's all right. Banqueta libre, a por ella tras mirada de los chicos del rincón. Me da igual, me siento. Pienso en la academia de donde vengo 120 de matricula, 115 al mes. Ya puedo ponerme las pilas, empiezo en marzo el mes de..., el mes de no seque. Es un mes que no tiene nada. Febrero es el mes de mi santo y mi cumple. Mayo el de las flores, abril el de las aguas 1000, pero marzo? Me acuerdo de que si me pasaran cosas en Marzo, pero estoy luchando por no acordarme. Voy a ponerme otra canción. La una y no me tengo en pie. Pago y el tipo respira aliviado. Enfilo hacia la puerta y me la como por que se abre hacia dentro, el hijo puta este no respeta ni las ordenanzas municipales. Ridículo estrepitoso, pa chulo yo, que me piro y dejo la puerta abierta. En la esquina miro a la peña que esta en el Velluga. Los observo. Me miran desde dentro. Me estoy calando. Pienso si entrar pedirme otra caña, o entrar pedirme otra caña y pegarles una ostia a todos los que me miran y parece que sonríen. Me largo hacia Cuatro Caminos. Por hoy ya esta bien

4.2.07

Veo los telediarios y compruebo como hablan de apropiación de símbolos nacionales, gritos contra el gobierno, etc. De un tiempo aquí tengo tertulias, que no discusiones, con amigos y conocidos sobre los símbolos del país y sobre lo que significa hoy en día ser patriota y la vigencia que tiene serlo.
Desde posiciones de izquierda, el hecho de portar la bandera de la nación es desde siempre algo mal visto. En las muchos ocasiones que hemos tenido los españoles de unos años para acá de salir a la calle para manifestarnos, no ha sido frecuente ver en la mitad de ellas la bandera roji-gualda. El hecho de que en la izquierda no se estile su exhibición viene sin duda de los 40 años de franquismo y de la identificación de esos colores con la dictadura. Creo que el error más claro de la república fue cambiar la banda inferior de la bandera al color morado de los comuneros. La bandera en la historia del país siempre fue roja y amarilla, y no había motivo para cambiar más que el escudo de la nación y adaptarlo a los nuevos tiempos sin monarca. Se cambió. Está bien. Se produce un golpe de estado fascista y estos se alinean otra vez bajo los colores tradicionales del pendón. Con la reimplantación de la democracia y la llegada de la constitución, desaparece de la bandera el símbolo de identificación faccioso, el águila de San Juan (escudo que aludía a la época imperial y de mayor gloria de nuestro país, por cierto) y se implanta un escudo monárquico. Hasta el Partido Comunista acepta la nueva identidad y lo que es más importante, la forma de articularse el Estado bajo la monarquía parlamentaria. En las manifestaciones y apariciones publicas del P.C.E. de la transición se retiran por la fuerza y a veces con violencia a quien exhibe la bandera republicana, generalmente grupos de extrema izquierda del PTE, el PSP, etc., los revolucionarios invendibles que acabaron todos en la casa común, vamos. Con el paso de los años la bandera de la nación se acepta y su uso se normaliza, aunque inevitablemente se deja en manos de una mitad del país. En la otra sigue estando mal visto hasta nombrar a España y se prefieren términos tan idiotas y franquistas como “estado”. A todo esto, los nacionalismos se van consolidando en democracia e incrementan su influencia y poder político en algunas comunidades. Por supuesto, la bandera nacional allí ni aparece.
En la hora en que nos encontramos, la muestra de la bandera de la nación sigue yendo por los mismos derroteros. Gente como Gaspar Llamazares, cada vez que salen en televisión lo hace escoltados por banderas de la republica en manifestaciones que nunca tienen que ver nada con la república pero en las que aprovechan para mostrarla sin mejor motivo. No sabe seguramente la sangría de votos que pierde cada vez que sale en esas condiciones, y el flaco favor que hace a su propia organización cada vez más huérfana organizativa e ideológicamente, pero cada vez más dispuesta manifestarse y a salir a la calle por cualquier motivo que se preste a aceptarlos. Quien sí saca a la calle la bandera de España y ahora hasta se pone el himno como banda sonora es la derecha y ultra-derecha patria. Lo que me pregunto es ¿Por qué esa parte de la población se ha apropiado del símbolo más distintivo del país? ¿Por qué se consideran más españoles que el resto? y sobre todo, ¿por qué la izquierda ha dejado en manos de la derecha este uso, casi en exclusiva, y no hace de ellos símbolo de identidad? Si yo no puedo exhibir los símbolos de mi país ¿de que país lo voy a exhibir? ¿Con que país me voy a identificar? ¿Qué vínculos de unión nos unen? Siempre he creído que el patriotismo verdadero se tiene que basar en las obligaciones y en los derechos (Franklin D. Roosevelt), es decir, en pagar impuestos, en tratar bien el medio ambiente, en ser respetuoso con los monumentos, con las infraestructuras, con los vecinos, etc., etc. Yo conozco ejemplos de grandes patriotas de este tipo. Los que me educaron. También conozco el otro tipo de patriotismo, el de la bandera. Suelen ser gente que vota a la derecha aunque lo que les gustaría sería no tener que votar porque estuviéramos como antes. Defraudan impuestos a dos manos, ya que ellos no tienen por qué mantener al Estado. Les jode que sus impuestos vayan a bibliotecas (generalmente nunca las pisan) a hospitales (ellos tienen cobertura privada) y educación (ellos llevan a sus hijos a escuelas privadas donde no hay inmigrantes). Los conozco también de primera mano, no me los estoy inventando. ¿Son ellos más patriotas que yo?
Todo esto viene porque a veces tengo que justificar el querer bien a mi país, porque existe mucha gente que no entiende que te sientas orgulloso de su historia y que reconozcas los muchos horrores y errores que ha tenido ésta. Porque la bandera roji-gualda es más mía que de los que no pagan impuestos, o por lo menos tanto. Porque el hecho de sacarla no debería ser síntoma identificativo de facherío, y porque mucha culpa de que así sea la tiene la izquierda que tanto federalismo quiere y que no entiende que el federalismo, el progresismo, etc. (¿hay algo más de izquierdas que el estado jacobino?) no tiene que estar reñido con el patriotismo. Qué hartura de rojerío clasificador del periódico que lees, de la radio que escuchas, y de la música que te gusta. Anta tanta confusión y complejo, una panda de salva-patrias ponen el himno de España al final de una manifestación. Que confuso es todo. Como ellos mismos dicen… No en mi nombre.