23.5.07

The Times They Are A-Changin'... Para mal.


Como no tengo ganas de teorizar y sí de que llegue el jueves, me pregunto y me respondo.
Antaño, en las elecciones siempre se castigaba al mangante, al que privatizaba, al que metía la mano en la caja común, al que se cargaba lo de todos. Vale que siempre estuviera bien visto el hurto a lo intangible y poderoso. Los bancos, etc.…
Pero esa tendencia ha cambiado en los últimos años de forma completa y radical. Ahora está bien visto o, por lo menos, se obvia y se mira para otro lado con plena aceptación. Aquí el vicepresidente de la Comunidad Ignacio González otorga la explotación del famoso campo de golf en Chamberí (campo de golf que se declara de “interés público” para saltarse la ordenanza municipal en un distrito que carece de parques y espacios verdes) a un hermano suyo, y a la peña (quitando la honrosa excepción de la asociación de vecinos del barrio, donde no milita y no esta afiliado ni el Tato) se la trae floja.
En Valencia se lucran recalificando sus propios terrenos el presidente y vicepresidente de la Diputación de Castellón, con lo cual cuadruplican sus sospechosos patrimonios desde que se dedican a la política, (léase “Lo Público”!!) y las encuestan parece que quieren aplaudirlos.
Ya no es que la gente no se entere o no tenga medios para protestar y cambiar la situación. ¡Es que les da absolutamente lo mismo! Las respuestas que escuchan son del tipo: “Ya, y quién no lo haría si estuviera ahí” o “Ya llegarán los otros y se lo llevarán igual”. El hurto está ya absolutamente aceptado y adaptado a nuestra mentalidad. La derecha creedora de que el país y el poder les corresponde por herencia divina ha logrado que su pensamiento y forma de actuación sea lo más normal del mundo.
La derecha consiste en tres o cuatro planteamientos generales y básicos. Destrozar el Estado de bienestar para privatizarlo previo abandono y destrozo, previa desacreditación y desmantelación, primero lo hacen malo e inútil, luego lo venden por que no sirve. Eso sí, lo venden por cuatro cuartos a amigos cercanos que se aprovechan con unas adjudicaciones fantasmas y tramposas. Ese es otro de sus ejes programáticos. El amiguismo, el lucro en los negocios a costa de lo público. Siempre hay en toda obra, negocio, explotación que se adjudica a un amigo cercano o un pariente que se adapta con calzador al pliego de condiciones (¿verdad, Alberto, que si encima te la chupa cómo vas a decir que no?). Siempre hay algún favor pendiente (los ricos funcionan así, a golpe de teléfono) que hay que hacer a alguien. Alguna cesión de licencia, alguna promoción de pisos a parientes, alguna licencia para negociete…
Eso es la derecha en este país. Eso es el P.P. Y lo peor es que eso es lo que han conseguido hacer creer a los demás que somos. Ya digo. ¡¡Hoy eso está bien visto!! La gente te dice que haría lo mismo si pudiera. Tengo amigos que lo hacen. ¡En su triste vida no hicieron otra cosa que trabajar para pagar un piso y ahora tiene varios alquilados! Hay hijos de puta que compran promociones de pisos vacíos para alquilarlos y venderlos y te lo dicen con una sonrisa en la boca, guiñando un ojo.
Eso sí, no dejan de dar lecciones de urbanidad y patriotismo a los demás. Que si la patria, que si el Estado… Llegaron a insultar a Pilar Manjón diciéndole que, por sus putos muertos, ellos perdieron las elecciones. Ésa es la gentuza de la que estamos rodeados, que nos gobierna en la Comunidad de Madrid y en el Ayuntamiento con sonrisa de terciopelo, diciendo que no puede llegar a fin de mes. Para ellos, el patriota es Fernando Alonso. Héroe nacional que lleva la bandera española en el casco y que esta empadronado para pagar impuestos en Suiza y no en España.
El golfismo es imperante y general. Que sepan al menos que lo sabemos. Que sabemos quiénes son y lo que hacen. Que nos mean y nos dicen que llueve…

1 comentario:

Benedicto dijo...

Estamos cerca de ellos, les olemos el cogote. No van a seguir recalificando cada centimetro de sierra o les ponemos en los juzgados.