En realidad la idea del blog surgió en las últimas clases de
la facultad, cuando llegaba lo mejor y empezabas a atar los cabos que llevabas
5 años viendo. El blog quiso ser el diario de un flâneur que iba a expos y
paseaba por la ciudad. Un paseante que descubría y al que le pasaban cosas y
que las contaba en su blog. Al poco tiempo de abrirlo lo que descubrí es que ni
pasaban tantas cosas ni iban a dar para contarlas en un blog de Arte. Así que el blog
se convirtió en una cosa donde se hablaba de uno.
Con la moda de los blogs cualquier pichipata se creía escritor
entonces y yo no iba a ser menos. Un par de crónicas afortunadas recibieron los
elogios de Laura Requejo, alguien lo suficientemente buena como para alentar
esta aventura y además corregirla y promocionarla quitándose de su explotadísimo
tiempo. Ella es la persona a la que tengo que agradecerla que esto existiera
además de muchísimas otras cosas que nunca le podré agradecer lo suficiente
pero que no se me olvidaran en la vida.
Al poco tiempo descubrimos que incluso se follaba con el
blog y para que más Nicolás… El blog se convirtió
en un tontodromo para piropear en público a quien no es que hubiera leído mucha
poesía, como para considerarme poeta. Y mientras contábamos las reuniones que teníamos
con Pablo Díaz Torres y Raúl Soto, Dormíamos con Gogoybari y leíamos los
comentarios de theoldmermaid.
Mientras se despotricaba contra todo con una facilidad que
aún no me explico cómo no he dado con mis huesos en el trullo. Se halló también
que el pasado se podía contar con velocidad y absenta y quizás ahí se acertó y
se escribió lo mejor de estas páginas. Mi infancia mi juventud y la historia de
mis padres. Chabolas, pelotas de los grises, niño de la transición y la movida…
Y Atleti y baloncesto y Bob Dylan y Arte porque no soy otra cosa.
Luis Ponce lo sabe que seguramente ha sido quien más ha entrado aquí. Se ha
seguido escribiendo como se ha podido. Con menos tiempo porque aunque el blog
la hizo daño también la hizo gracia alguna vez y coló una canción de U2 y una
cita. Siempre digo que si valieran algo los poemas, no estarían aquí a la intemperie.
Para que Iriarte se los mande al otro y echen unas risas. Pero tampoco es que me
importe mucho.
A sí que se cumplen 10 años de esto aquí y ahora ya no se
publica nada, no vamos a engañarnos. Al menos algo que merezca porque para escribir
sobre algo hace falta tiempo y un poco de esfuerzo, cosa que no hay. No se va a
cerrar el blog como era mi idea cuando me di cuenta de que este año hacia tanto
tiempo de que lo abrí. No lo voy a cerrar aunque no escriba porque quizás mañana,
cuando Helena crezca, yo tenga más tiempo y más ganas para contarles un cuadro
que me transporte a otro sitio, o un poema, o un viaje…
Ahora, este mes van a escribir tres amigos que han estado
entrando siempre en el blog, y que además han acompañado mi vida mientras lo escribía.
Porque se cumplen 10 años y no sé cuando volveré a pasar por aquí… Ellos van a
dar de sí lo que a mí no me queda.
2 comentarios:
La grandeza está en la autenticidad, en escribir con sabiduría y personalidad, y de eso hay aquí un rato pare, un abrazo!
Muchas gracias Rafa. Yo lo intento, tú lo consigues.
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